El papa Francisco criticó enérgicamente la cultura machista que persiste en la sociedad durante un encuentro con la organización española Manos Unidas. En su discurso, enfatizó el papel fundamental de las mujeres en el desarrollo mundial.

"Estamos acostumbrados con esta cultura machista a tener a la mujer como un ser humano de segunda categoría", señaló el Pontífice, destacando que son precisamente las mujeres quienes "llevan adelante el mundo".

Para ilustrar su punto, Francisco compartió una reveladora anécdota sobre Ursula Von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea. Tras resolver exitosamente una compleja negociación financiera entre Bélgica y Holanda, Von der Leyen explicó su método con un simple gesto: "Como hacemos las mamás".

El Papa resaltó cualidades distintivas del género femenino, como la genialidad, la compasión y la tenacidad, señalando específicamente cómo las mujeres sostienen familias y pueblos enteros, acercándose a las necesidades con una sensibilidad única.

Este mensaje refuerza el compromiso del Vaticano por reconocer y valorar el papel esencial de la mujer en la sociedad, alejándose de estereotipos y prejuicios tradicionales que han limitado históricamente su reconocimiento y participación.

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