El presidente Donald Trump firmó una nueva ley migratoria que permite la detención de migrantes por delitos menores antes de ser condenados. La legislación, nombrada "Ley Laken Riley", es la primera de su segundo mandato.

La ley fue inspirada por el asesinato de Laken Riley, una estudiante de enfermería de 22 años que falleció en Georgia en febrero de 2024 a manos de José Ibarra, un inmigrante venezolano indocumentado.

Puntos clave de la nueva ley:

• Autoriza detenciones por delitos menores como hurtos en tiendas
• Los detenidos quedarán bajo custodia del ICE
• Permite a fiscales estatales intervenir en políticas migratorias federales
• Faculta al Departamento de Estado para restringir visas a países que no acepten deportaciones

La medida fue aprobada con apoyo bipartidista en ambas cámaras del Congreso, aunque grupos de derechos civiles advierten que podría provocar redadas masivas y eliminar el debido proceso para acusados de delitos no violentos.

La implementación requerirá aproximadamente $3,000 millones adicionales y aumentar la capacidad de detención a más de 60,000 espacios. Trump ha indicado que esta ley es solo el inicio de medidas más estrictas contra la inmigración irregular, buscando aumentar las detenciones diarias a entre 1,200 y 1,500.

El presidente enfatizó su compromiso con deportaciones masivas y aseguró que continuará implementando políticas similares para "restaurar totalmente el estado de derecho en el país".

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