El presidente de Panamá, José Raúl Mulino, rechazó tajantemente la exigencia del presidente electo de EE.UU., Donald Trump, de reducir los peajes del Canal de Panamá, defendiendo la soberanía y gestión panameña de la vía interoceánica.

Mulino explicó que los peajes se establecen mediante un proceso público y transparente, donde participan clientes y diversos actores del sector marítimo internacional. Recordó que en ocasiones anteriores, las posiciones de los países usuarios han influido en la configuración de las tarifas.

El mandatario panameño destacó que durante la administración estadounidense del Canal (1914-1999), Panamá recibía pagos mínimos por la operación de la vía. Desde su transferencia al control panameño el 31 de diciembre de 1999, según los Tratados Torrijos-Carter, la gestión ha sido eficiente y soberana.

Respecto a las acusaciones de Trump sobre presencia china en el Canal, Mulino fue categórico: "No hay chinos en el Canal. Tan sencillo como eso. Ni chinos ni de ninguna otra potencia están en el canal", afirmando que la única presencia china se limita a turistas y pasajeros de cruceros.

Sobre temas bilaterales, Mulino indicó que esperará hasta el 20 de enero, cuando Trump asuma su segundo mandato, para discutir asuntos importantes como la migración ilegal. Sin embargo, enfatizó que no hay posibilidad de replantear la situación jurídico-política del Canal, que es definitivamente panameño.

En cuanto al nombramiento de Kevin Marino Cabrera como embajador estadounidense en Panamá, Mulino manifestó que evaluará su beneplácito cuando llegue el momento oportuno.

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