El presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva se encuentra "neurológicamente perfecto" tras someterse a una cirugía urgente por una hemorragia intracraneal, según informó su equipo médico.

Lula, de 79 años, fue operado exitosamente el martes en São Paulo para tratar un hematoma cercano al cerebro, consecuencia de una caída que sufrió hace dos meses en el baño de la residencia presidencial en Brasilia.

Este jueves se sometió a un cateterismo femoral complementario para reducir el riesgo de futuros sangrados. El neurocirujano Marcos Stavale confirmó su óptimo estado neurológico, y se espera que reciba el alta de cuidados intensivos el viernes.

Los médicos prevén que el mandatario abandone el hospital a principios de la próxima semana y regrese a Brasilia, donde deberá guardar reposo relativo durante algunas semanas. El drenaje quirúrgico insertado el martes fue retirado sin complicaciones.

La emergencia médica ocurrió cuando Lula fue trasladado el lunes por la noche al hospital tras experimentar dolores de cabeza. Los médicos detectaron una hemorragia intracraneal relacionada con la caída del 19 de octubre, que requirió una operación urgente en la madrugada del martes.

El vicepresidente Geraldo Alckmin ha asumido parte de la agenda presidencial, aunque Lula mantiene el ejercicio de sus funciones, incluso firmando documentos oficiales de manera digital durante su hospitalización.

Este incidente ha reavivado el debate sobre la sucesión en la izquierda brasileña de cara a las elecciones presidenciales de 2026. Aunque Lula ha expresado su disposición a presentarse si no surge otro candidato, espera que haya una "gran renovación política" en su partido.

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