El papa Francisco, de 88 años, se encuentra en estado crítico debido a una neumonía bilateral que requiere oxígeno a alto flujo. El pontífice está hospitalizado en el Gemelli de Roma desde el 14 de febrero, donde su condición se ha complicado con diversos problemas de salud.

Su cuadro clínico actual incluye:

• Crisis asmática prolongada que requiere oxigenación
• Insuficiencia renal inicial (leve, bajo control)
• Trombocitopenia estable tras transfusiones
• Anemia en mejoría

A pesar de su estado, el Papa envió un mensaje tranquilizador: "Continúo con confianza mi hospitalización, siguiendo los tratamientos necesarios". Sin embargo, expertos médicos como el virólogo Fabrizio Pregliasco advierten que las próximas horas y días serán cruciales, especialmente por el riesgo de septicemia.

La comunidad internacional se ha unido en oración por su recuperación:

• En Argentina: Fieles se reúnen en la Catedral de Buenos Aires
• En Irak: Iglesias de Mosul celebran misas por su salud
• Líderes mundiales expresan su apoyo y preocupación

Esta es la cuarta hospitalización del Papa desde 2021, generando preocupación sobre su capacidad para liderar a los 1.400 millones de católicos. A pesar de sus problemas de salud, Francisco ha mantenido una agenda activa, incluyendo una gira de 12 días por Asia-Pacífico en septiembre.

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