La mayoría de empleados de USAID serán despedidos o enviados a licencia antes de la medianoche de este domingo, según informó la agencia estadounidense, como parte de los esfuerzos de la administración Trump para reducir el gasto gubernamental.

Aproximadamente 1,600 trabajadores en Estados Unidos serán despedidos mediante un proceso de "reducción de personal". El resto del personal contratado por USAID a nivel mundial será puesto en licencia administrativa, exceptuando aquellos responsables de funciones críticas, liderazgo clave y programas especialmente designados.

Esta medida representa un paso significativo en el desmantelamiento de USAID, una agencia que cuenta con más de 10,000 empleados y gestiona diversos programas humanitarios y de desarrollo en todo el mundo. La decisión se produce después de que un juez federal levantara una orden que detenía los planes de la administración Trump.

USAID ha confirmado que financiará los gastos de repatriación para el personal basado en el extranjero. El personal restante que continuará trabajando será notificado a las 17:00 horas locales (22:00 GMT).

La agencia, que maneja un presupuesto de más de 40,000 millones de dólares asignado por el Congreso, ha sido crítica para el "poder blando" estadounidense global. Sin embargo, Trump y sus aliados, incluyendo Elon Musk, han acusado a la agencia de "fraude", aunque con limitadas evidencias.

A lo largo de su historia, USAID ha enfrentado críticas por sobrecostos y cuestionamientos sobre la efectividad de algunos de sus programas. No obstante, ha sido fundamental como herramienta de influencia estadounidense para persuadir a otros países en favor de sus intereses.

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