El Gobierno de Trump autorizó este martes las redadas migratorias en lugares anteriormente considerados "protegidos", incluyendo escuelas, iglesias y hospitales, al revocar una directriz establecida durante la administración Biden.

Esta nueva medida elimina las restricciones que impedían a los agentes de migración realizar operativos en:

• Centros educativos
• Lugares de culto
• Hospitales
• Albergues para víctimas de violencia doméstica
• Funerales
• Manifestaciones
• Centros de ayuda tras desastres naturales

El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) justifica la decisión argumentando que "empodera" a los agentes para "seguir las leyes" y capturar "criminales extranjeros". Sin presentar evidencia específica, el DHS afirma que hay criminales que utilizan estos lugares como refugio para evadir arrestos.

La medida se implementa un día después de que Trump asumiera la presidencia, alineándose con su promesa de campaña de ejecutar la mayor operación de deportaciones en la historia de Estados Unidos.

La directriz anterior, establecida por Biden en 2021, requería aprobación superior para realizar operativos en estos lugares, buscando garantizar que las personas inmigrantes no evitaran acceder a servicios esenciales por temor a ser detenidas.

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