La cifra de heridos por el atropello múltiple en Múnich se ha elevado a 39 personas, según confirmó el portavoz policial Christian Huber. Entre los afectados hay varios heridos graves, incluyendo una niña de dos años que permanece en cuidados intensivos.

El incidente ocurrió el jueves cuando un hombre de 24 años, solicitante de asilo afgano con residencia legal en Alemania, embistió intencionadamente contra una concentración sindical en el centro de la ciudad.

La fiscal antiterrorista Gabriele Tilmann informó que el sospechoso ha confesado la intencionalidad del ataque, citando motivaciones religiosas. Testigos policiales reportaron que el atacante gritó "Allahu Akbar" (Dios es el más grande) durante el incidente, aunque hasta el momento no se han encontrado vínculos con grupos extremistas específicos.

El suceso ha intensificado el debate político sobre inmigración en Alemania, especialmente a pocos días de las elecciones parlamentarias. La oposición conservadora ha anunciado que endurecerá las políticas migratorias si llega al poder.

Las autoridades continúan con la investigación para determinar todos los detalles del ataque, mientras algunos de los heridos siguen recibiendo atención médica en diferentes centros hospitalarios de la ciudad.

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