El Parlamento de Corea del Sur destituyó al presidente Yoon Suk Yeol tras su fallido intento de imponer la ley marcial el 3 de diciembre de 2024, desencadenando una crisis política sin precedentes en el país.

La votación resultó en 204 votos a favor de la destitución, 85 en contra, tres abstenciones y ocho votos nulos. Esta fue la segunda moción de censura presentada, después de que la primera del 7 de diciembre fracasara.

Yoon queda suspendido temporalmente mientras la Corte Constitucional tiene 180 días para validar o rechazar su destitución. Durante este período, el primer ministro Han Duck-soo asumirá como presidente interino, prometiendo mantener una "gobernanza estable".

Los eventos que llevaron a la destitución comenzaron cuando Yoon, de 63 años, intentó imponer la ley marcial y envió al ejército al Parlamento para impedir reuniones de diputados. El presidente justificó estas acciones alegando amenazas de Corea del Norte y acusando a la oposición de actuar como "fuerzas antiestatales".

La decisión provocó protestas masivas, con aproximadamente 200,000 manifestantes congregados frente al Parlamento. Si la Corte Constitucional confirma la destitución, Yoon se convertirá en el segundo presidente surcoreano destituido, después de Park Geun-hye en 2017.

"Me siento profundamente frustrado (...) pero ahora debo dar un paso al costado por un tiempo", declaró Yoon en un discurso televisado, llamando a terminar con la "política de los excesos y la confrontación".

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