Las hemorragias cerebrales duplican el riesgo de desarrollar demencia, según un nuevo estudio realizado por investigadores de Weill Cornell Medicine (EEUU). Esta investigación, publicada en la revista 'Stroke', analiza la relación entre las hemorragias intracraneales y el deterioro cognitivo posterior.

El estudio evaluó a cerca de 15,000 personas que sufrieron hemorragias intracraneales espontáneas, utilizando datos de seguros Medicare entre 2008 y 2018. Los resultados mostraron un incremento del 100% en diagnósticos de demencia durante un período promedio de 5.6 años después del evento, en comparación con más de dos millones de personas sin hemorragias.

Causas principales del aumento del riesgo:

• Acumulación de proteína beta amiloide en el cerebro
• Daño a los vasos sanguíneos cerebrales
• Alteración directa de la función cerebral

Estos hallazgos coinciden con estudios previos realizados en Dinamarca, donde se observó que:

• 11.5% de pacientes desarrollaron demencia tras hemorragias cerebrales
• El riesgo aumentó 2.5 veces comparado con la población general
• Los accidentes cerebrovasculares isquémicos aumentaron el riesgo 1.7 veces

Los expertos recomiendan examinar regularmente a pacientes que han sufrido hemorragias intracraneales para detectar deterioro cognitivo temprano. Además, sugieren priorizar la investigación sobre la seguridad de tratamientos anti-amiloide beta para el Alzheimer en personas con antecedentes de hemorragias cerebrales.

Se necesitan más estudios para comprender mejor cómo las hemorragias contribuyen a los diferentes tipos de demencia, especialmente considerando que los nuevos tratamientos pueden aumentar la supervivencia de los pacientes tras estos eventos.

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