Héctor Rodríguez persigue el sueño inconcluso de su padre en el béisbol
Héctor Rodríguez aprendió a jugar béisbol de su padre, heredando no solo su nombre sino también su pasión por el deporte. Veinte años después, el joven talento busca cumplir el sueño que su progenitor no pudo alcanzar: llegar a las Grandes Ligas.
Jugador de béisbol corre en uniforme rojo
Su padre, quien firmó con los Padres de San Diego por una modesta suma, no logró jugar en el béisbol organizado. Esta circunstancia se ha convertido en el principal motor de Héctor hijo, quien busca no solo el éxito personal sino también mejorar la situación económica familiar.
A sus 19 años, Rodríguez ya ha dejado huella en la Liga Dominicana de Béisbol (Lidom), ganando el premio Novato del Año en la temporada 2023-24 con los Leones del Escogido. En la actual temporada, apenas necesitó ocho juegos para demostrar que su talento es genuino.
Como prospecto de los Rojos de Cincinnati, sus estadísticas son prometedoras: en Clase A+ con los Dayton Dragons bateó .274, con 12 jonrones y 61 carreras impulsadas en 125 juegos. En cuatro temporadas en Las Menores mantiene un promedio de .294 y un OBP de .337.
Albert Pujols, actual mánager de los Leones del Escogido, lo describe como un "prodigio", mientras que Jorge Mejía, instructor de bateo, lo considera un diamante en bruto. Jimmy Paredes, capitán del equipo, lo reconoce como uno de los mejores bateadores actuales de la liga.
"La clave está en nunca dejar de trabajar. Cuando uno está haciendo las cosas bien, ahí es que hay que seguir entrenando", afirma Rodríguez, quien a sus 20 años se perfila como una futura estrella junto a compatriotas como Elly De La Cruz, Jeimer Candelario y Noelvi Marte.
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