Los aranceles del 25% impuestos por el presidente estadounidense Donald Trump sobre productos de Canadá y México entrarán en vigor este sábado, mientras que aún evalúa si incluirá el petróleo de estos países en los gravámenes.

Trump indicó que la decisión sobre los aranceles petroleros dependerá de si considera justo el precio cobrado por estos socios comerciales. La medida se vincula principalmente a frenar la inmigración ilegal y el contrabando de precursores químicos para fentanilo.

Esta política podría contradecir la promesa de Trump de reducir la inflación y los costos energéticos, ya que los aranceles podrían elevar los precios de la gasolina para los consumidores. Según una encuesta AP VoteCast, el 80% de los votantes consideran los precios del combustible como una preocupación significativa.

Estados Unidos importa diariamente casi 4,6 millones de barriles de petróleo de Canadá y 563.000 de México, mientras su producción nacional promedia 13,5 millones de barriles diarios.

La Cámara de Comercio de Canadá advierte que estos aranceles serían "un impuesto para Estados Unidos" que aumentaría costos y generaría caos en los negocios integrados. Sin embargo, Trump resta importancia a posibles impactos negativos, afirmando que Estados Unidos puede autoabastecerse.

Actualmente, los precios del petróleo se mantienen en aproximadamente 73 dólares por barril, mientras que la gasolina promedia 82 centavos de dólar por litro (3,12 dólares por galón) en Estados Unidos, similar al precio del año anterior.

Trump también anunció que China enfrentará aranceles por exportar precursores químicos para fentanilo, agregando un 10% adicional a los impuestos existentes sobre productos chinos.

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