El presidente estadounidense Joe Biden ha autorizado a Ucrania el uso de armas estadounidenses de largo alcance para realizar ataques limitados dentro de territorio ruso, según revela The Washington Post citando a dos altos funcionarios del gobierno.

La decisión permite específicamente el uso de misiles supersónicos ATACMS, con un alcance de 300 kilómetros, que pueden portar cabezas convencionales o de racimo. Esta autorización surge como respuesta al despliegue de aproximadamente 10,000 soldados norcoreanos que se han unido a las fuerzas rusas en la región de Kursk.

La medida también busca enviar una señal disuasoria a Corea del Norte para prevenir el envío de más tropas. El gobierno ucraniano había solicitado estas armas durante meses, argumentando que son necesarias para degradar significativamente la capacidad militar rusa.

Esta autorización podría fortalecer la posición de Ucrania antes de un posible cambio en la administración estadounidense en enero, especialmente ante la perspectiva de que Donald Trump, quien ha prometido terminar con el conflicto, asuma la presidencia.

Hasta el momento, ni la Casa Blanca, el Pentágono o el gobierno ucraniano han confirmado oficialmente esta información.

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